PANECILLOS DE BACON, OLIVAS Y NUECES

Hoy, Día Mundial del Pan, he querido dejar mi aportación a este alimento tan básico y esencial, ya que no debería faltar en ningún hogar del mundo.

Que he utilizado: 

Para la masa:

200 gr. de harina panificable
120 ml. de agua mineral
3 gr. de sal
1´1 gr. de levadura liofilizada

Para el relleno:

20 gr. de nueces
2 lonchas de bacon ahumado (aproximadamente 35 gr.)
8-10 olivas negras ( alrededor de 35 gr.)

Para el acabado:

1 cucharilla de café de hiervas provenzales
2 cucharillas de café de aceite de oliva

Como lo he hecho: 

He cortado el bacon en cuadraditos pequeños. He troceado las aceitunas del mismo tamaño y las he añadido con el bacon. He picado las nueces mas o menos del mismo tamaño y las he añadido al bol junto con las olivas y el bacon, he mezclado y he reservado.

He mezclado el aceite de oliva con las hierbas provenzales y he reservado.

Para preparar la masa del pan he mezclado en el bol de la amasadora la harina, la levadura y el agua. He amasado un minuto y he añadido la sal. He amasado durante 7-8 minutos hasta obtener una masa suave y homogénea  Le he añadido la mezcla de bacon, olivas y nueces y he amasado durante 1 minuto más hasta que se han integrado los ingredientes.  He untado con un poco de aceite un bol, he sacado la masa de la amasadora, le he dado forma de bola y la he metido en el bol La he tapado con papel film y la he dejado fermentar en un lugar alejado de corrientes de aire (la he metido dentro del horno  apagado) durante 2 horas.
Tras el tiempo de fermentación, he desgasificado la masa y la he dividido en 5 porciones de unos 80 gr., les he dado forma rectangular y los he depositado en la bandeja de horno. Los he cubierto con un paño de cocina y los he dejado fermentar durante 1 hora, dentro del horno apagado.
He horneado los panecillos a 220ºC con vapor y calor arriba y abajo durante 12 minutos. He retirado del horno y los he pintado con la mezcla de aceite y hierbas provenzales.Los he horneado durante 3 minutos más. Los he retirado del horno y los he dejado que enfriasen.

Y este es el resultado: 

Riquísimos....

Deliciosos tal y como están con una cervecita o un vino blanco fresquitos,  pero abiertos y rociados con un hilo de aceite de oliva y una cortada de queso manchego bien curado, ummmm!!!. O con queso roquefort y ...un trozo de chistorra frita calentita??? Imaginación al poder.